Aumento extremo de peso y síndrome metabólico son algunos de los efectos adversos de la medicación antipsicótica en niños y adolescentes. Conoce lo que se estudia en la actualidad para contrarrestarlos.
Los efectos secundarios de los antipsicóticos atípicos en niños y adolescentes, indicados en casos de esquizofrenia y trastorno bipolar, son peores que en adultos, según refieren distintos estudios científicos.
El tratamiento con antipsicóticos de segunda generación, como la olanzapina, se asocia con aumento de peso y también con aumento de los niveles de colesterol total, LDL (“colesterol malo”) y triglicéridos, además de intolerancia a la glucosa en los pacientes pediátricos.
No se trata de marcadores aislados. El aumento de todos estos valores promueve el riesgo de padecer obesidad, síndrome metabólico y diabetes tipo 2. Sin embargo, ni los pediatras ni los padres suelen tener en cuenta estos efectos colaterales de los fármacos antipsicóticos en niños y adolescentes, que ponen en peligro la salud cardiovascular no sólo durante la juventud sino también en la adultez.
Descubre los tratamientos en investigación aquíCómo evitar los trastornos metabólicos en niños y adolescentes
Aunque se le presta poca atención en la niñez y adolescencia, el síndrome metabólico es un conjunto de síntomas que incluye dislipidemia, resistencia a la insulina e hipertensión, lo que genera riesgos de infarto cardíaco y cerebral, además de diabetes.
En la población infantil, la obesidad ya es de por sí un problema generalizado hoy. El tratamiento de un año con antipsicóticos en adolescentes o niños puede sumar 5 kg al sobrepeso existente y un perfil metabólico que alarma. De ahí que se busquen tratamientos antipsicóticos para niños que no provoquen aumento de peso ni alteraciones en los lípidos, la glucosa o que generen inflamación general en el organismo infantil.
En adultos, un fármaco así ya existe: la combinación en una sola píldora de olanzapina (OLZ) y samidorfano (SAM), una droga que bloquea a los opiáceos y disminuye el apetito. El desafío es utilizar este fármaco ahora en niños y adolescentes que usan antipsicóticos, un 60% de los cuales padece efectos secundarios metabólicos por la olanzapina y suele abandonar el tratamiento.
Por eso se está llevando a cabo un estudio en distintos países para ensayar la combinación de OLZ/SAM versus la olanzapina sola en pacientes pediátricos con antipsicóticos. Pueden participar gratuitamente adolescentes latinoamericanos de hasta 17 años con esquizofrenia o trastorno bipolar que ya estén tomando olanzapina o que tengan indicación para empezarla. El objetivo es evitar que desarrollen trastornos metabólicos que pongan en riesgo su salud.
Descubre los tratamientos en investigación aquíReferencia bibliográfica:
Cutler, A. J., Panchmatia, H. R., Hughes, A. G., Webb, N. S., Doane, M. J., & Jain, R. (2025). Healthcare Resource Utilization 6 Months Before and After Olanzapine/Samidorphan Initiation: Real-World Assessment of Patients with Schizophrenia or Bipolar I Disorder. Advances in therapy, 10.1007/s12325-025-03211-w. Advance online publication. https://doi.org/10.1007/s12325-025-03211-w
Lebowitz, M. R., & Nurmi, E. L. (2021). The Burden of Antipsychotic-Induced Weight Gain and Metabolic Syndrome in Children. Frontiers in psychiatry, 12, 623681. https://doi.org/10.3389/fpsyt.2021.623681
Kryzhanovskaya LA, Xu W, Millen BA, Acharya N, Jen KY, Osuntokun O. Comparison of long-term (at least 24 weeks) weight gain and metabolic changes between adolescents and adults treated with olanzapine. J Child Adolesc Psychopharmacol. (2012) 22:157–65. doi: 10.1089/cap.2010.0020