La anemia y la enfermedad renal crónica suelen ir de la mano. Los síntomas son poco específicos. Al respecto charlamos con el Dr. Juan Andrés Oddino (MP: 14976) quien nos contó acerca de la investigación clínica que vienen desarrollando para lograr una mejora en los tratamientos.
Juan Andrés Oddino pertenece a la Fundación de Estudios Clínicos en Rosario, donde se está desarrollando un ensayo clínico para probar un medicamento por vía oral para la anemia por insuficiencia renal. Una enfermedad con síntomas inespecíficos, razón por la cual suele ser de diagnóstico tardío.
“Los síntomas son bastante vagos: fatiga, falta de ganas de hacer cosas, agitación con el esfuerzo, cansancio. Pero son síntomas que no son específicos y hay muchas entidades que pueden provocarlos. Por eso uno los valora interrogando al paciente, examinándolo, y obviamente viendo los análisis que trae a la consulta”, comienza explicando el profesional.
La anemia provoca una serie de complicaciones a largo plazo de la enfermedad renal: “problemas que suman morbilidad al paciente. hacen que su corazón se ponga más gordo y que sea más susceptible de cuadros de insuficiencia cardíaca, que el deterioro sea mayor, más rápido”, agrega Oddino.
Estar atentos a la enfermedad
Esta enfermedad no afecta a un sector etario en particular. “Pero a medida que envejecemos se calcula que casi el 20% de las personas que andan dando vuelta por la calle tienen algún grado de enfermedad renal crónica”, explica el investigador.
Es por esto que hay que estar atentos a los factores de riesgo como el tabaquismo, la obesidad, la hipertensión y la diabetes.
Mejorar el tratamiento
“El tratamiento de la anemia en la enfermedad renal crónica hoy se hace con ampollas subcutáneas, como se hace con la insulina. Se aplican dos o tres veces a la semana de acuerdo a la indicación médica. Hoy la alternativa es realizar un ensayo clínico con una medicación que se administra por boca. Tiene la ventaja de que el paciente no tiene que inyectarse”, concluye Oddino.