Descubrí cómo el lupus afecta la sexualidad y la intimidad. Datos clave, consejos útiles y estrategias para mejorar tu vida sexual con lupus.
Hablar sobre lupus y sexualidad puede parecer un tabú, incluso en las consultas médicas. Sin embargo, la intimidad es parte fundamental de la calidad de vida, y quienes viven con lupus también atraviesan cambios físicos, emocionales y hormonales que pueden afectar su deseo sexual, su autoestima y la manera en que se relacionan con sus parejas. Es hora de abrir esta conversación.
La buena noticia es que no estás sola ni solo: muchas personas con lupus han reportado dificultades similares. Estudios recientes confirman que los desafíos sexuales son comunes en quienes conviven con enfermedades autoinmunes, y que abordarlos de forma abierta puede mejorar significativamente el bienestar emocional y físico. En esta nota, abordamos los principales aspectos que vinculan al lupus con la sexualidad, brindando información basada en evidencia y consejos útiles para enfrentar estos cambios con mayor confianza.
¿Cómo afecta el lupus a la sexualidad?
El lupus es una enfermedad autoinmune compleja que puede impactar múltiples sistemas del cuerpo, desde la piel hasta los órganos internos. Uno de los efectos menos visibilizados es su impacto en la vida sexual. Las personas con lupus pueden experimentar dolor articular, fatiga extrema, brotes cutáneos, alteraciones hormonales y efectos secundarios de la medicación que afectan directamente el deseo sexual, la lubricación o la capacidad de mantener relaciones sexuales satisfactorias.
Además de los síntomas físicos, existe un componente emocional profundo. La autoimagen puede verse afectada por los cambios corporales, la aparición de lesiones en la piel o la pérdida de cabello. Esto, sumado a la ansiedad, el estrés crónico y los síntomas depresivos, puede disminuir el interés en la intimidad. Un estudio publicado por la Revista de la Sociedad Argentina de Reumatología señaló que las mujeres con lupus presentaban un aumento significativo de disfunción sexual en comparación con mujeres sin la enfermedad.
El deseo no desaparece, pero puede cambiar
Aunque los síntomas del lupus puedan disminuir el deseo sexual, esto no significa que el interés por el placer o la intimidad desaparezca. Simplemente, puede expresarse de formas distintas o necesitar otros tiempos. “La sexualidad es una parte integral del ser humano. No desaparece con el diagnóstico, pero sí necesita ser reinterpretada desde la nueva realidad del cuerpo”, señala Jennifer Selles, licenciada en Psicología y especialista en sexología.
Aceptar que el deseo puede cambiar, y que eso no significa que haya desaparecido, es un primer paso. Es importante que las personas con lupus puedan explorar otras formas de vincularse, ya sea a través de caricias, masajes, comunicación afectiva o el uso de ayudas como lubricantes o juguetes sexuales. Estos recursos no solo ayudan a recuperar la intimidad, sino que también fortalecen la conexión emocional con la pareja.
Comunicación: la herramienta clave para la sexualidad
Hablar abiertamente sobre los cambios en la sexualidad es fundamental, tanto con la pareja como con el equipo de salud. Muchas personas sienten vergüenza o temor de mencionar estos temas durante la consulta médica, pero es esencial hacerlo para buscar soluciones adecuadas. Según el Hospital for Special Surgery, “los médicos pueden ayudar con estrategias específicas si conocen el problema. Pero primero es necesario iniciar la conversación”.
También es clave abrir el diálogo con la pareja. Expresar cómo te sentís, qué te duele, qué te genera inseguridad o qué cosas sí te dan placer, puede transformar la relación. La empatía y la comprensión mutua son esenciales para atravesar juntos los desafíos que trae el lupus a la vida sexual. La clave es recordar que la intimidad no es solo el acto sexual, sino también la cercanía emocional y física que se construye día a día.
Descubre más sobre los tratamientos en estudio para Lupus aquíConsejos prácticos para mejorar la sexualidad con lupus
La planificación puede ser una aliada. Elegir momentos del día en que te sientas con más energía, evitar el contacto físico durante brotes activos y adaptar las posiciones sexuales pueden marcar una gran diferencia. Algunas posturas pueden reducir la presión sobre las articulaciones o zonas sensibles, haciendo que el encuentro sea más cómodo y placentero.
Además, es importante consultar sobre los efectos de la medicación. Algunos fármacos pueden disminuir la libido o causar sequedad vaginal, pero existen tratamientos para contrarrestar estos efectos. El uso de lubricantes a base de agua o geles especiales puede ser muy útil. Y si hay dolor persistente o dificultades emocionales, hablar con un terapeuta sexual o psicólogo especializado puede ofrecer nuevas herramientas.
¿Se puede tener una vida sexual plena con lupus?
Sí, absolutamente. Aunque el camino pueda requerir ajustes, comprensión y nuevas formas de conectarse, una vida sexual satisfactoria es posible. Muchas personas con lupus han logrado reconstruir su intimidad desde un lugar más consciente y libre de presiones. La clave está en entender que la sexualidad es diversa, dinámica y no está limitada por la enfermedad.
“Hablar de sexualidad es hablar de dignidad. Y eso incluye la posibilidad de sentir placer, de elegir cuándo y cómo vincularse, y de vivir la intimidad desde el respeto por uno mismo y por el otro”, señala la Lic. Selles. Que el lupus no te robe ese derecho: con información, apoyo y escucha, se puede volver a disfrutar.
Descubre más sobre los tratamientos en estudio para Lupus aquíFuentes:
Hospital for Special Surgery. Lupus, Sexuality, and Intimacy: Beginning the Conversation. Disponible en: https://www.hss.edu/conditions_lupus-sexuality-intimacy-beginning-conversation.asp
Revista de la Sociedad Argentina de Reumatología. Disfunción sexual en mujeres con lupus eritematoso sistémico (2022). Disponible en: https://ojs.reumatologia.org.ar/index.php/revistaSAR/article/view/484/359
Lupus Foundation of America. Can I Have a Normal Sex Life With Lupus? Disponible en: https://www.lupus.org/resources/can-i-have-a-normal-sex-life-with-lupus